domingo, 29 de julio de 2012

Ve por él!

Soltar fantasmas, papeles.
Tejer callando, humedades.
Levar las anclas, con pena.
Rasgar el suelo, buscando.
Saber de la añoranza de ese beso,
no detiene el momento, la partida.
Tener la certeza de la muerte,
no detiene la urgencia de tu entraña.
“De rellenar grietas”, como dijo el poeta,
de alisarlas digo yo, para cuidar el tacto.
Si tus manos no trabaron con las suyas,
desencanto.
Si no llegaste a su boca,
cobardía.
Si esa caricia no detuvo el tiempo,
si esa mirada se pasó de largo,
si todo eso fue, carbón sin brasas...
Sacude tu invalencia, forja un ramo,
un ramo de brisas de tu aliento,
un ramo de caricias de tu mano,
y ve a dejarlo cerca de su puerta,
o mejor, pegado a su ventana.
Hazlo por ti, por él y por la vida.
Quita ese plomo que atraviesa el pecho y corre,
liviandad, quimera..
Ve por él, no temas,
no siembres de papel la madrugada!

sábado, 21 de julio de 2012

Ojos de cielo

Por quererte me declaré libre, aunque no sé de libertades suficientes. Sólo recuerdo tu presencia crepitante, no debilita el miedo, lo apacigua. Con esos ojos de mirar sereno, entrampaste los míos sin salida. Y hoy no es amor ni desconsuelo, es alegría de vida bien vivida. No te reprocho nada, estás absuelto, de toda maldición bien merecida. Pues te bendigo ahora, ojos de cielo, por desterrar el duelo de mi vida. Si nunca quise así, te lo agradezco. Si no volví a encontrarte, tema mío. Como míos serán tus labios breves, como míos tu recuerdo y tus olvidos. No te miraré más, no te estoy viendo, y a pesar de eso te destilo. Te dedico un pasado contundente, te auguro un futuro de imprevistos. Hoy sólo anidan en mis brazos tus otoños, los que no viste y no tocaron piso. De tu cuerpo, la marca en el ombligo, sobre un tiempo que vale mil inviernos. Tiempo de serte, entelequia y mieles, de tu pecho a mi boca sólo un trino. Y entonces llega el fin del bello cuento, todo vuelve a su sitio en el camino, todo se acomoda de callado, la historia terminada, es el destino.

miércoles, 18 de julio de 2012

Menos la indiferencia, todo se pilotea


Escribir para mi es “Un gustito que me doy”, sin mayores pretensiones. No tengo un estilo definido ni me juego por una forma, ninguna me ha enamorado todavía. Los que me leen han dicho que lo que escribo es bello, que sale del alma, que es común y corriente, que son pavadas, que podría tener suerte vendiendo postales románticas, que mis reflexiones son buenas, que mi prosa es medio porno. También me han dicho que soy sensiblera y que escribo para mujeres, otros que soy sensible y le toco el alma a alguna gente. Hay quien me ignora olímpicamente y quien me lee sin comentar nada. Con todo este ramillete, cómo no seguir adelante??? Me encanta lo que descubro de mí en cada texto, me gusta pila cuando le gusta a otros, no me enojo cuando no les gusta y acepto las críticas como parte de mi crecimiento. Gracias a todos y todas los que le dan bola a lo que escribo, aún para decirme cursi, porque para alguien que escribe y publica cosas, lo que peor le hace es la indiferencia, lo otro se pilotea!!!!!!

lunes, 16 de julio de 2012

Donde no llega...

Donde no llegan las palabras, llega la mirada. Pero es condición necesaria, no suficiente, que esos ojos no le teman al silencio. Dos que se miran sin hablar, quedan a merced de un hilo de vida que los resume y los conmueve. El silencio permite la comunión de las pieles, que guardan sus latidos para el mejor momento. Para sembrar la luz de los abrazos, para encandilar al otro con haces de ternura.
Donde no llegan las palabras llega la caricia, es la piel que toca con todas sus partes, de la punta del pie a la coronilla, estremecida piel, órgano mágico, diseña sus volutas de viejos ensambles, dejando a su paso temblores de fajina. La caricia se posa en el lugar justo que es cualquiera, en el inmenso territorio de los cuerpos. Para crear milagros y conjuros, para amar de adentro para afuera, de afuera para adentro, con la insensatez propia de los cuentos.
Condición suficiente, que se escuche todo lo que no se dice, que se diga todo lo que el alma grite, que los amantes no claudiquen ante el miedo, ese miedo antiguo de quedarse solos, ese sufrir lento del que espera y espera, que llegue la mirada y la caricia a desvelar su sueño.

sábado, 14 de julio de 2012

Cultura androcéntrica

Durante nuestra época fértil, las mujeres tomamos intensa noticia de nuestro potencial reproductor. Cada mes, el útero se prepara, engrosa sus paredes para anidar un embrión y uno de los ovarios en sintonía, saca a luz un óvulo, pronto y maduro para ser fecundado. El revuelo hormonal es innegable, un cuerpo y un alma se preparan para albergar vida. Si el óvulo no se fecunda en la trompa, “cae” al útero y se lleva consigo el colchoncito, ésto se llama menstruación. Este fenómeno natural, es vivido de forma muy diversa por las féminas. Puede haber cambios de humor, o no; pueden aparecer dolores en el vientre, o no; puede que el óvulo haya sido fecundado por un tenaz espermatozoide y se quede a crecer, o no; puede incluso no quedarse. Esto tiene que ver con los ciclos lunares, con las emociones, con la vida de la mujer. El hombre mira y no entiende. Entonces se enoja con esos ovarios y cuando la mujer está susceptible, la mira y le dice ”Ovárica, estás ovárica”. Ellos deben estar testiculáricos y no se dan cuenta, y lo peor es que nosotras tampoco.
Vivimos en una cultura androcéntrica, donde el poder está puesto en el pene. El útero está devaluado, así, cuando una mujer está sin pareja y de mal humor por cualquier razón, se resume en “Lo que le hace falta es un buen polvo”, he aquí el poder omnipresente del pene como proveedor de paz y buen humor (que lo es, a qué negarlo, pero no sólo él).
Ahora, cuando entramos en la menopausia, poque nuestro cuerpo ya no está en etapa de procrear, resulta que no nos pueden decir ”Ováricas”, por lo tanto nos van a intentar calificar de “menopáusicas” como si fuera una patología psiquiátrica. Pues no lo es, después de los 50 todas sabemos que llega “ese” momento en el que no menstruamos más, empieza una etapa diferente, con desbalances hormonales también, baja de estrógenos y pila de cosas más. Es NORMAL, igual que antes lo era menstruar. Para qué escribo ésto? Para formular un pedido: No nos estigmaticen por ser mujeres, por tener ovarios, útero y vagina. No nos juzguen según la cantidad de hormonas que secretamos o dejamos de secretar. Nos molesta. Es injusto. También nos ponemos de mal humor porque tenemos problemas laborales, porque la plata no alcanza, porque no podemos estar con nuestros afectos tanto como quisiéramos, por el costo de la vida, por la basura en la calle, porque no nos da bola el que nos gusta, por el precio del boleto y del barril de crudo.
Debemos decir con viva voz, que el mundo no gira alrededor del pene, se los aseguro. Aunque no le quito mérito, válgame el cielo, que es estupendo y no tiene culpa de nada, poberello!!!!!!

martes, 10 de julio de 2012

Ensayo y error

Vamos probando a tientas por la vida porque lo que pasa después de este minuto, no lo sabemos. Ni la más sabia de las personas sabe lo que va a pasar en su vida en el instante que sigue. Conozco gente muy organizada que sabe hacer lecturas, en base a un histórico conocido, y trabajan para embocarle a lo que va a pasar, ¡y a veces pasa!
Hay gente que no, que se sube al ómnibus con una gran expectativa por lo que el día va a contener. El contenido de los días no está producido, hay que ir haciéndolo, minuto a minuto, aunque no nos percatemos de ello. Puedes hacer aquello que hace tiempo deseabas, o dejarlo en la gatera para cuando estén dadas las condiciones. Con esto último hay que tener especial cuidado porque les tengo malas noticias… las condiciones no están ni estarán dadas jamás de los jamases. Hay que producir también las condiciones, uy!, ya me estoy sintiendo poderosa con esta toma de conciencia brutal acerca de la impredecibilidad de la vida, de lo que va a pasar y su circunstancia. ¿No es de locos ir por la vida así, a tientas y sin lazarillo? Es una enormidad de posibilidades que se nos abre de tomar buenas y malas decisiones. Es más, por más que hayamos avanzado grandes tramos en contenidos de vida generados, no obtenemos certificado de “Libre de fallos”. Nos equivocamos un montón y otro tanto hacemos bien. Lo terrible es que cuando hacemos las cosas bien, hay pocos para aplaudir, pero cuando metemos la pata hay un pueblo dispuesto a hacerte saber lo mal que estuviste. Esto es muy del ser humano, no debemos asustarnos de tal actitud. Es más fácil criticar el contenido en recipiente ajeno que tomarle el gusto al propio. Pero no nos quejemos, si al fin y al cabo, esto es una hermosura. La vida digo, ¿qué pensaban?

sábado, 7 de julio de 2012

Desenredando el alma.

Cuando el alma se enreda hay que ir despacito, sus fibras delicadas requieren mucho cuidado. Es recomendable ponerla a remojo con agua tibia y aceites esenciales. Luego hay que abrigarla, para que repose y se vayan separando los hilos, ablandando los nudos. Es así que quedaría en condiciones para peinarla. Hay que proceder con manos suaves, ya que un peine o cepillo podrían dañar su textura. Hay mil razones por las cuales se te enreda el alma, desencuentros e imprevistos, fríos y desamores... Las precauciones que hay que tomar al devanarla son fundamentales. No intentes un ovillo apretado, dale mejor la consistencia de la espuma. Aliméntala con música suave, con historias, con bellos sueños, con amores. No la dejes al descubierto, es importante saber que está a nuestro cargo. Si vienen provisiones del afuera, bienvenidas sean, siempre ayudan al mantenimiento de un alma desenredada y saludable. Pero no esperes por eso, debemos esmerarnos porque nada es más sustentable que el amor que nosotros mismos le prodigamos. Cuida su salud y verás como pronto florece! Ella existe para prodigarse, para conversar con otras, para contagiar vida.

domingo, 1 de julio de 2012

Seguir es el plan

No hay desamparo posible si has guardado suficientes besos en tu alma. Si has tomado precauciones, los abrazos que diste y que te dieron, habrán formado un nido cálido para escampar el frío y ponerte a salvo del desamor. Si has logrado que tu corazón esté suelto, limpio y ligero, él podrá detener tu cabeza cuando ella se ponga tonta. Son una bendición todos los holas y adioses que nos hicieron libres. Es caminando que se va y se viene, seguir es el plan.