sábado, 28 de diciembre de 2013

Se parte la noche

Se parte la noche de recuerdos. Los que saben dicen que hay que mirar el presente, tenerlo sentido, es ahora. Pero el presente se te esfuma en menos de un segundo... ya es pasado lo que puse antes. No hay manera, o miras hacia atrás, o sueñas de aquí en adelante. De un aquí medio larguito, es decir, diremos como licencia poética, que el presente es lo que te está pasando ahora con una desviación estándar de más menos un día. Si no, es de locos. Pero qué tanto! Los recuerdos son ahora, si los estoy teniendo. Si vienen con ellos los aromas, la canción que sonaba, el llanto y la sonrisa, todo viene. Pero va cambiando, no se puede recordar todo, hay que adornarlo, es fácil. No obstante hay recuerdos que no prescriben, imágenes limpias que perduran a través de la vida. No se te contamina por ejemplo, el llanto de tu bebé al nacer, ni sus manitos, están intactos. Hay algunos recuerdos de amores que no caducan. Y hay también, algunos dolores insidiosos, tenaces. “Vivir el presente”, bah, quien lo diga y lo repita que venga y me demuestre, que hay un presente que no se conjugue con lo que has sido y que, en alguna medida, no esté perdiendo vigencia.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Títere

Juraría que no sabes de la inocencia de tus ojos, que muestran el hueso cuando miran. Que no sabes con certeza lo que tu piel envuelve. Yo vi debajo de ella con las manos, y estaba claro, como el agua en superficie.
Sin vida propia con hilos de guitarra. Títere feliz movido por tus dedos, hilos metálicos de corriente alterna. Donde sea que tu tocas saltan chispas, salen a jugar los años en grupitos, arman jaleo por la casa toda y hasta la calle van a meter lío.
Sigue así, volando sin reserva, que se queda en mi la mansedumbre tibia guardando en su cajón un carretel con hilos, por si volvieras, en medio de la tarde, para mirarme así , para jugar con ellos, para sorber latidos.