martes, 30 de septiembre de 2014

Estaciones

Yo no te vi en verano. No te miré salir del agua, no te salpiqué la cara.
No estuve contigo bajo el sol ni caminé en tu playa.
Y no dormí en tu cama ni desayuné contigo, no hubo sonrisa, nada.
Yo no pasé mi mano por tu pelo, tampoco por tu cara.
No estuve en tu casa ni en tu mente.
Y no dije tu nombre ni dormida, y no te desperté,
temprano en la mañana.
Yo no te vi en otoño. No pateamos hojas secas,
juntos por la calzada.
No estuve en tus sueños ni en los míos.
Y no sentí en mi frente tu mirada,
no tuve tus besos en mi cuello.
Y no canté en tu oído. No te abrigué, no hizo falta.

Yo no te vi en verano y no dormí en tu cama.
Yo no dije tu nombre ni dormida.
Y no te vi en invierno, y seguiré sin verte.
No importa que el cielo esté gris, ocre o luminoso,

No te veré mañana.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Déjate mojar la cara

Si te enmudece la ira, sal a la calle. No le permitas quietud, avanza contra ella en un mar de preguntas. Por qué vienes? Quién te trae? Qué razón defiendes? Ella tendría que saber, tendría que poder decir donde tiene las raíces, comprobarás que no sabe y no responde nada. Es engañosa y confusa, te remueve el alma y la evapora un poco, con su calor de rabia. Hay que tomarle los puntos y hacerlos suspensivos. Una receta infalible: Descomponer la llama en pequeñas chispas. Sí, tal cual. De esas que no queman nada, que son pura bulla. Porque si te descuidas, con su tenacidad de araña, envuelve todo lo que sale a su paso, teje, en doble línea va entrampando las partes de las cuales se componen tus cosas. Juega con tus portones la telaraña lista para la cacería. Y caza, caza sinceridades y caza besos. Es una predadora, no lo olvides! Te deja especulando odios, sinsabores, trastos viejos. La ira no repara nada, es descuidada y maligna. No sabe dar consejos, no está para eso, dice. Ella sólo viene cuando hay que rematar algo, un pensamiento o un sentir, una vuelta de la vida. Usa su fuerza contra ella, se quedará pasmada, sin saber nada, ni de donde vino esa manta paz que la va cubriendo hasta apagar su llama. Hay muchos lugares donde encontrar con qué tejerla, la manta. Hay fibras de calma en cada hoja, en cada planta, en un abrazo, en dos palabras, por la vereda de tu casa. Si sigues caminando un poco, hallarás más fibras, es seguro. No hay que comprarlas ni mandarlas hacer, ya vienen prontas para disipar rabias. Busca en tu manojo de recuerdos, déjate mojar la cara. Tararea una canción, eso la mata.

sábado, 20 de septiembre de 2014

Amar sin más ni menos

Que me tomes en tus brazos y me tengas. Que me sostengas de amor y de dolores. Hombre te pido una mirada fija, te pido ojos amorosos, ojos con alma. Que cuando tu boca bese, renueve el ciclo. Que cuando tu mano toque, cambie la piel. Con un espejo en la mano, reflejar todo tramo de pieles, el recorrido,  reflejado en la mano, el recorrido. Tan sólo erizar manos y aledaños, te pido hombre, que le des vuelo a tu amor eterno. Porque la piel se seca, los ojos se hunden... pero el beso, si se queda prendido, te interpelará por siempre.
Amar tanto como se pueda, de esta forma y de las otras... Si lo que tienes para dar es bueno, estarás sembrando flores en un corazón que podrá ser nuevo en primavera.

El amor no lo puede todo, es la gente que ama la que puede, si quiere, amar sin más ni menos.